El rincón de los animales es un espacio de trabajo muy rico por la amplitud de aprendizajes que provoca. La elaboración de sus hábitats hace que se tengan que cuestionar sobre sus características y necesidades, sobre cómo interactúan y los cambios que se producen en ellos entre otros aspectos. A su vez, se fomenta el juego simbólico y la invención de historias de manera natural.
La previa clasificación de los animales en grupos, animales marinos, del desierto, polares, del bosque, de la granja, etc, invita a la recreación de los diferentes hábitats o lugares donde pueden vivir los seres vivos según sus características particulares. Cada hábitat provee de las condiciones necesarias para vivir, tales como abrigo, temperatura adecuada, tipo de vegetación y comida.